Verificamos el resultado del proceso y pulimos detalles para evitar modificaciones posteriores.

Las modificaciones de último minuto pueden entorpecer o eliminar el esfuerzo que hemos realizado en la planeación y creación de nuestra experiencia. Cómo cualquier proceso de aprendizaje es necesario contar con el tiempo suficiente para fijar las ideas que van a ser transmitidas al público en la mente del presentador. Por esto es necesario  dar fin al proceso y sus preparativos con suficiente anterioridad.

Realizar cambios a pocos días u horas de la presentación aumenta el estrés y el riesgo de experimentar algún fallo. Es por esto que en esta etapa nos aseguramos de no dejar cabos sueltos y prever los aspectos técnicos invisibles para el público, pero esenciales en nuestra experiencia.

La siguiente lista de chequeo ayuda a verificar los elementos más frecuentes que deben ser tenidos en cuenta para la realización de una presentación exitosa, que muchas veces son pasados por alto.

  • Revisión detallada
  • Prueba de recursos
  • Alistamiento de computador
  • Plan de emergencia